Las agujas de acupuntura son muy finas, y la mayoría de las personas solo sienten una ligera molestia o pinchazo al ser insertadas. Una vez en su lugar, la sensación es mínima o inexistente..

La acupuntura puede ayudar con el alivio de dolores crónicos, estrés, ansiedad, insomnio, problemas digestivos, desequilibrios hormonales, y más. También se utiliza para mejorar el bienestar general.

Las agujas estimulan puntos específicos en el cuerpo para promover el flujo de energía (Qi) y equilibrar el sistema energético, lo cual ayuda al cuerpo a sanar y reducir síntomas.

El número de sesiones varía según cada persona y condición. Algunos problemas agudos pueden mejorar en pocas sesiones, mientras que condiciones crónicas pueden requerir varias semanas o meses de tratamiento.

La acupuntura busca equilibrar el flujo de energía en el cuerpo, reducir el dolor y estimular los mecanismos naturales de sanación del cuerpo para mejorar el bienestar.

Después de aliviar los síntomas, algunas personas optan por sesiones de mantenimiento, como una vez al mes, para prevenir recaídas y mantener el equilibrio energético.

Los efectos secundarios son mínimos y pueden incluir leve enrojecimiento o pequeñas molestias en los puntos de inserción. En general, la acupuntura es segura cuando es realizada por un profesional capacitado.